Piratas, o los Roles En Vivo

Soy un jugador de rol desde hace unos dieciocho o diecinueve años. Lo que abarca casi toda mi vida consciente de mi mismo. Desde que empezamos, con la caja roja de D&D (lo siento Impe, por algún lado teníamos que empezar, y además el resultado no ha estado tan mal) hasta el presente he jugado incontables partidas con numerosísimos sistemas distintos. Pero muy desde el principio, los freaks de mis amigos y yo queríamos llevar a la realidad esas épicas partidas. Dado que los futuristas era más bien complicado, nos decantamos por lo medieval. Eramos muy ñajos y muy cafes, yo especialmente; así que nos fabricabamos armas de madera (sí, así sin recubrir ni nada) y nos ibamos a donde en aquel momento se terciara a "rolear en vivo". Lo que hacíamos, realmente, era darnos estacazos durante todo un día, sin ningún, o casi ningún tipo de historia o trama. Entre "rol en vivo" y "rol en vivo" (y lo pongo entre comillas por aquello de lo poco de rol que aquello tenía) dejabamos discurrir un tiempo prudencial, que generalmente era el que necesitabamos para recuperarnos de las contusiones, heridas variadas y en general el deterioro generalizado que nos producía tan gratificante actividad.
Un día, no recuerdo ya muy bien por qué, dejamos de hacerlos. Seguímos jugando en mesa, pero imagino que nos habíamos hecho muy mayores ya para andar con espaditas (eso es lo que creo que pensaban algunos de los habituales. A mí nunca me pasó, de hecho, aún conservo alguna espada de las de entonces)
Pasó el tiempo y yo emigré a Irlanda, país del que jamás me cansaré de hablar, creo. El caso es que allí me metieron en grupo de pirados llamado la SCA (Society for Creative Anachronism) que era parecido a lo que hacíamos en aquellos rudimentarios vivos, pero con armaduras y escudos de verdad (acero y cuero) y sin contener para nada los golpes. Dejé de ir a las reuniones de la SCA por que volví al terruño, y aquí no había de eso (creo que están haciendo ya cositas, pero no he puesto suficiente interés. Aún) pero le había cogido las ganas de nuevo. Así que cuando me hablaron de Efeyl, a pesar de mis reservas me apunté.
¿Por qué las reservas? Por que en este mundillo, como en cualquier otro, abundan los imbeciles, y yo, que no soy particularmente social, no tenía ganas de encontrarmelos en una afición, el rol, que había definido, definía, y define gran parte de mi personalidad. No sé si es que me vuelvo viejo, pero cuando empezamos con esto de los dados, había mucho menos oligofrénico. Pero me estoy yendo de varas.
Participé en mi primer vivo, "El Torneo Dragón" y me encantó. Conocí a un montón de gente, aunque interioricé solo a unos pocos, y el caso es que no estaba tan mal. Y decidí seguir con ello. Eso ha tenido muchas repercusiones, como por ejemplo el que yo esté escribiendo este blog. Pero sobre consecuencias, otro día. Por el camino he descubierto que efectivamente tenía razón, que hay imbeciles en este mundo (¿submundo del rol de mesa, podríamos decir?), que me he llevado algún palo por ello y algún mal trago, pero en general, la experiencia ha sido muy positiva. Me ha dejado un bagaje de experiencias y de gente increible.
Y este pasado fin de semana he participado en un vivo distinto de los que había jugado hasta el momento, por que la norma es hacerlos de fantasía medieval (hay una serie de razones para ello, y cada uno tiene su opinión a cerca de ellas. Si quereis las mías, ya sabeis, preguntad) y este ha sido de piratas. Ha sido muy, muy bueno, y estoy de nuevo entusiasmado por el ReV, entusiasmo que había perdido por diversas razones que ahora no vienen al caso.
Brindo por muchos más.
 
(6) mucha gente dice cosas!