Monday, February 16, 2004

Ayer me sentí profundamente el abuelo Cebolleta. Sí, por que mi prima de 13 años (sí, trece) es ya toda una mujercita. Claro, pasarse las tardes encerrada con sus amigas en una discoteca light, la ha convertido ya en una adolescente con todo lo que ello conlleva. El antro en cuestión es la antesala del copazo y la borrachera (a mi prima aún le falta un poco, imagino, para llegar a eso, pero no soy un iluso y no creo que mucho), y no pude evitar pensar en si no es la niña aún un poco niña para todo eso. Maldita la prisa que tienen.
Aunque mi prima es una de esas niñas repugnantes que no son capaces de cerrar la boca al hablar, que pronuncian siempre dos eses...("jo, ess que, ¿hass vissto? Pochola se ha comprado un móvil más caro que el mioo..."), que están enamoradas del Gran Hermano, y que si el contenido de su ropero no es, por lo menos, igual de caro que el presupuesto anual de la CIA, se consideran desgraciadísimas. Así que, quizá sea cruel, pero el atrofiamiento cerebral que le auguro probablemente tenía ya raíces, no es solo una cosa cultural, y por tanto no es una gran perdida. Espero equivocarme, eso sí, después de todo es familia, y a sus padres les quiero un montón.
Digo que es cultural a posta. Por una noticia que leí ayer en un periodico de tirada nacional, uno de los de mayor tirada de hecho, o sea, teoricamente importante. De prensa seria (de nuevo, teoricamente), además, no estoy hablando del Marca o el As. Bajo la sección de Cultura (sí, Cultura, habeis leído bien) de dicho diario anunciaban el divorcio de Barbie y Ken. Cubierto en plan serio, dando las razones de la separación de la célebre pareja.
En fin. Como todo el mundo sabe, el elemento químico más abundante no es el Hidrógeno. Es la estupidez. Y en este país, muy abundante.
P.D: Esta entrada la escribí a lo largo del lunes. Digo a lo largo por que no ha habido manera de conseguir publicarla en las sucesivas veces que lo he intentado. Así que si alguien busca el articulito de marras, que lo haga en la prensa del domingo. 

(3) mucha gente dice cosas!