Ayer fue uno de esos días. Uno de los que prefieres no hablar, pero al final lo haces por soltar vapor. Fue lunes, nunca ha sido mi día preferido del mes. Un amigo muy próximo me dijo que su padre tiene un linfoma. Me peleé con alguien a quien quiero mucho, y por una chorrada. Me tiré todo el día triste, sin saber muy bien por qué.
Hoy, la mayor noticia del día es que ha muerto otro periodista en Bagdad. Otra muerte futil. ¿No lo son acaso todas? Esta es más próxima. Esta importa más. No era un soldado. Espero que se acabe pronto esta estupidez de guerra. Los chistes sobre Bush están bien, pero todo tiene un límite.  

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