La verdad es que es tardísimo, debería estar acostado ya hace rato. Pero de todas formas me va a costar un horror dormir, por que tengo un esguince en el tobillo y lo tengo tan hinchado que probablemente cada roce de la sábana sea una agonía de todas formas, así que un ratito de blog no me va a hacer mal anyway.
Ha pasado un fin de semana más. Sin pena ni gloria que diría aquel. Aunque quizá sí con pena, pero una tan vaga, tan sorda, que casi no cuenta, ¿no? Un elefante en una cacharrería me llama mi madre. Y aunque sepa que poco haya que pueda hacer... bah, que más da.

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