Friday, April 04, 2003

Apechuga

Ayer dormí en casa de mi madre. Hoy lo volveré a hacer, por que es el cumpleaños de mi hermano, y la verdad, volver hasta Colonia Jardín desde la otra punta de Madrid (literalmente hablando) al terminar me apetece más bien poco. Me hizo muy bien llegar a una casa en la que, sin grandes aspavientos, todos parecían contentos de verme (incluida Rocío, que teniendo en cuenta que es más o menos tan expresiva como una estatua de mármol, es decir algo). Y sobre todo me hizo muy bien no sentirme solo. La noche anterior cometí la última de las estupideces de una larga lista por sentirme así. Es un muy duro golpe provocar sentimientos de angustia y miedo en alguien que te importa.
Tengo que dejar la casa de Colonia Jardín. Es demasiado grande para mí, demasiado silenciosa, demasiado fría. Se me echa encima como un perro de presa nada más entrar en ella, y todo lo que deseo es que llegue la mañana y tener una excusa para abandonarla y andar por Madrid. Por la noche, cuando he de volver solo a casa, doy grandes rodeos andando para cansarme, y así caer dormido en cuanto llego a casa. *Suspiro*
En fin. Ojalá pudiera expresar la congoja que sentí al leer el miedo y el desprecio en las palabras de alguien especial. Pero no puedo. Apechuga con tus actos, idiota. Es lo que oigo decir a mi conciencia. La que grita cuando algo irreflexivo, imprudente e impulsivo corre por mi mente. Apechuga. 

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