Thursday, July 17, 2003

Deshecho

Bueno, llevaba algún tiempo sin ocurrirme nada realmente malo, así que imagino que ya tocaba.
Me han despedido del trabajo, acusado por una compañera de robar una tarjeta de memoria para una cámara digital. El hecho de que no lo hiciera no es un gran consuelo, por que por las circustancias hacen que lo pareciera. El sábado me compré una cámara digital, llevaba algún tiempo tras una, sobre todo por que no tengo muchas fotos. Todos estos años, y solo tengo un pequeño album. Nada más comprar la cámara, cogí una tarjeta de memoria y la abrí, para mirarla y juguetear con ella. Tiré el el envoltorio, pero me quedé con el código de barras, para que me la cobraran. Al rato se me acercó mi "compañera" enajenada, diciendome que si yo era el responsable de eso, señalando el envoltorio. Yo le dije que sí, que me la cobrara que me la llevaba. Y ella se puso a gritarme que no quería tener nada que ver en aquello. Encogiendome de hombros, le dije a otro compañero que me cobrara y ahí quedó todo... o eso creí yo. Esto ocurrió el sábado. El martes, o sea, ayer, me llamaron al despacho de un directivo que me informó de mi despido bajo la declaración de mi compañera. No había nada que hacer o discutir. El hecho (que yo reconozco) de que abriera el envoltorio es causa suficiente para la perdida de confianza. El directivo, casi comprensivo, me dijo que lo sentía, pero la intencionalidad no se puede tener en cuenta.
Así que así está la cosa. No tengo trabajo. Mi madre, que está hasta mañana de vacaciones, se enterará mañana jueves. Y teniendo en cuenta cómo entré en El Corte Inglés, va a ser una escena que no le deseo ni a mi peor enemigo. Me siento roto. 

(2) mucha gente dice cosas!